Vicky Cristina Barcelona


Resignación, inconformidad, desencanto... Quién sabe. No termino de ubicar el tema de esta película. Pero la anécdota es fácil de rastrear: la confusión que generan ciertos paradigmas entre un grupo de parejas y ex parejas que padecen las consecuencias de sus decisiones, con la capital catalana de fondo (desde una perspectiva súper guiri, hay que decirlo). La premisa no se desarrolla del todo y los personajes se quedan igual que al principio. Raro, pero padre. Y sin la tensión que caracteriza a Cassandra's Dream y Match Point. Scarlett Johansson es la turista boba, mientras que Penélope Cruz representa a una artista problemática, onda caricatura. De hecho, Woody Allen deja de ser neoyorquino para mostrarse enteramente estadounidense (autocrítico, eso sí) trabajando con prototipos inocentones y lineales: los europeos son apasionados y los gringos demasiado cuadrados. O sea. La construcción del guión, sin embargo, es acertada y consistente, y yo salí contento del cine. Pero no sé, no sé.