R.E.M.
Around the sun
Warner music, 2004
"Eccentricity is an easy face to put on, I certainly never want to fall into that". Michael Stipe.
Yo no creo en la Cábala (mucho menos en Madonna practicándola), pero sí confío en el análisis de las palabras como uno de los caminos más efectivos al momento de hurgar en el epicentro de una creación. Así pues, si nos ponemos nerds y nos dedicamos a revisar las letras que componen el Around the sun de R.E.M., terminaremos descubriendo que “you” es la palabra que más se repite. Como si Buck, Mills y Stipe hubieran decidido hacer a un lado sus vivencias y apreciaciones (sobre todo las políticas), para en lugar de eso recordarle al mundo, a través de melodías cuasipegajosas, guitarras electroacústicas fulgurantes y un tempo moderado, todo lo que éste les ha otorgado, para bien o para mal. Muy típico entre los músicos cuarentones, al menos entre aquellos que aún no caen en eso del adulto contemporáneo. De este modo, no sorprende hallar sentencias como “Jesus loves me fine and your words fall flat this time” (“Make It All Okay”) o “you’ve mirrored my best disguise and turned it back to me” (“High Speed Train”). ¿Para qué quejarse?, ¿para qué alegrarse? A tales alturas, lo que calma es describir. De este álbum, destacan la pulcra producción de Paul McCarthy, la arriesgada, pero bien lograda colaboración con Q-Tip en “The Outsiders” (que recuerda un poco a “Radio Song”) y la dulzona sensación de melancolía hipnotizante, esa que sólo las carreteras gringas abandonadas y los discos de R.E.M. son capaces de provocar.
Jorge Pedro Uribe Llamas
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