No sé qué hizo el pelele que mandó la inmobiliaria ayer para arreglar mi baño, pero me he quedado sin agua caliente. Con gas y agua, pero sin agua caliente. Tuve que medio bañarme con agua fría y ahora mismo me encuentro de pésimo humor (y en pleno cierre de la edición de mayo). Así que, oh, lectores, díganme qué debo hacer para recuperar mi buen ánimo.